Hay aficionados a los juegos de construcción LEGO que, de vez en cuando, lavan las piezas en su lavadora para limpiarlas de suciedad. Algunas piezas se unen al azar formando estructuras sencillas. Pero en algunas ocasiones abrir la puerta de la lavadora es encontrar estructuras complejas de gran belleza. ¿Cómo es posible que el puro azar pueda dar lugar a estas estructuras? Una bonita analogía de lo que ocurrió con el nacimiento de la vida y sigue ocurriendo con la evolución de las especies.
Nos lo cuenta Marc Abrahams, “Evolution of Complexes from LEGO™ Bricks in a Washing Machine,” Improbable Research, 08 May 2014; artículos más detallados en Ingo Althöfer, “Evolution of Complexes from LEGO™ Bricks in a Washing Machine,” Annals of Improbable Research 20: 6-8, Mar-Apr 2014; Ingo Althöfer, “Random Structures from Lego Bricks and Analog Monte Carlo Procedures,” Friedrich-Schiller University, Report, September 2013 [PDF].
Ingo Althöfer (Universidad Friedrich-Schiller Ernst, Jena, Alemania) pasó diecinueve semanas y media realizando experimentos de lavado de diferentes grupos de piezas de LEGO en su lavadora de marca Miele. Las piezas son envueltas en una toalla o metidas dentro de un calcetín grande (de los que se usan para meter regalos de Navidad). En estos experimentos la lavadora se puede interpretar como un ordenador analógico que implementa el algoritmo de Montecarlo.
En algunos de sus experimentos Althöfer aplicó un proceso de selección artificial, eligio ciertas combinaciones de piezas obtenidas al azar que añadió a futuros experimentos de “lavado” para estudiar su robustez y comprobar si se lograban estructuras aún más complicadas.
Los experimentos de Althöfer no se limitan a la lavadora, también ha utilizado la plancha (cubriendo las piezas con una tela vieja), el microondas (metiendo las piezas en agua), etc.
Los interesados en una descripción detallada de sus experimentos pueden consultar su web Ingo Althöfer, “Brick Washing Links. Meine wunderbare Wasch-Saison,” May 2013 – April 2014 [web con enlaces].
La entrada La evolución ilustrada con piezas de lego dentro de una lavadora fue escrita en La Ciencia de la Mula Francis.